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lunes, 21 de mayo de 2012

"Ward Pigs": la historia detrás de Black Sabbath sin Bill Ward



Como muchos sabrán, el pasado 11 de noviembre de 2011 Black Sabbath dio a conocer una excelente noticia para el ámbito metalero en general: la banda volvería al ruedo, formación original mediante, no solo para tocar y girar a nivel mundial sino además para grabar un nuevo disco. Gran noticia gran.

Pero por qué "volvería", en condicional, y no "vuelve", en presente? Porque la reunión nunca se dio. O mejor dicho, se dio en parte: Bill Ward (baterista y miembro fundador) nunca volvió a la banda. Por qué? Problemas contractuales donde el más (por no decir único) perjudicado era el mismísimo Ward. Si, problemas de dinero. A esta altura del partido. Y tan mal quedó la relación entre Ward y sus ahora ex-colegas que las fotos que figuran en la web oficial de Sabbath fueron modificadas a pedido del abogado de Bill Ward, por lo menos hasta que finalicen las fechas ya programadas. Si, se sacó a Ward de las fotografías. Algo similar al episodio con Van Halen en 2007, donde las fotos del bajista Michael Anthony fueron reemplazadas por las de Wolfgang Van Halen, hijo de Eddie. En menor medida, claro.

El pasado sábado 19 de mayo, Black Sabbath tocó por primera vez en siete años y desde la noticia de la reunión, más precisamente en el O2 Academy de Birmingham, ciudad natal de Black Sabbath, donde la banda no tocaba desde hace trece años. Las entradas fueron vendidas en solo diez minutos. Quien reemplazó a Bill Ward fue Tommy Cufletos, baterista de Ozzy Osbourne en su banda solista, quien sucedió a Mike Bordin (Faith No More), que tocó con Ozzy desde 1997 y grabó dos de sus discos: "Down To Earth" (2001) y "Black Rain" (2007)



En la web oficial de Black Sabbath, se pueden leer idas y vueltas, respuestas de la banda a Bill Ward y comentarios de fans enfurecidos con la decisión de seguir adelante aún sin Ward en las filas de la agrupación. Desde afuera, hay quienes culpan a Sharon Osbourne (esposa y manager de Ozzy) y quienes tildan de infantes a los reunidos Black Sabbath. Lo cierto, como siempre, es que los perjudicados terminan siendo los fanáticos, que desde noviembre del año pasado tienen la ilusión de vivir por primera vez un show de Sabbath, formación original mediante. Para muchos, los bateristas son simples elementos que pueden ser reemplazados. Para otros, me incluyo, no. Si la idea es volver al ruedo como en los viejos tiempos, la formación debe ser la original. La prometida. Y por putos problemas contractuales (léase dinero) no es ni va a ser así. Es una realidad. Una puta realidad. Una inentendible realidad. Quizá esté sucediendo otra cosa y nosotros, los de afuera, no lo sabemos. Lo cierto es que por un lado tenemos a Ward y al resto de la banda, dando su visión de los hechos, sus verdades. Y por el otro, a los miles y miles de fanáticos alrededor del mundo que lo único que quieren es presenciar la reunión prometida... que por ahora nunca se dio.

Todo bien con Cufletos. Todo bien con Tony Iommi, que volvió a escena luego de haber sido diagnosticado con las primeras etapas de un linfoma. Todo bien con Geezer Butler. Todo bien con Ozzy. Pero para la redacción de So Metal it Hurts, sin Ward no hay Sabbath.

2 comentarios:

  1. son malditas vedettes!!!

    gracias por compartir

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  2. ¡Sin Ward no es Black Sabbath!
    Harry Haller

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