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lunes, 16 de abril de 2018

Between The Buried And Me - "Automata I" (2018)


(click en la imagen para agrandar)


Octavo disco de estudio de Between The Buried And Me, banda norteamericana de Metal Progresivo, por momentos similar a Dream Theater, aunque bastante más ambiciosa y pretenciosa que los de Petrucci y con voces podridas y algún que otro elemento tomado prestado del Deathcore. "Automata I", producido por Jamie King, es el primer lanzamiento a través del sello Sumerian Records, así como además es la primera parte de un disco conceptual, cuya segunda y última parte ("Automata II") verá la luz en unos pocos meses (verano norteamericano). Sobre el disco, el guitarrista Paul Waggoner dijo: "no queremos repetirnos. Siempre estamos tratando de hacer algo diferente y este disco cayó en ese tipo de patrón. Nos empujamos a nuevos lugares, mientras conservamos nuestro sonido básico. Musicalmente, vamos a un lugar que es divertido y desafiante. Nunca sabemos cómo va a salir. Estas son aguas desconocidas para nosotros. Nunca hemos escrito una pieza completa y la presentamos en partes separadas como ésta". El concepto detrás de "Automata" se basa en la habilidad de ver los sueños de otras personas. Al respecto, el frontman Tommy Rogers dijo: "qué pasaría si los sueños pudiesen transmitirse con el propósito de entretener? Podrías consumir los pensamientos más íntimos de otra persona en la pantalla? Si pudieras, qué dice eso acerca de una audiencia hambrienta de atención? Más importante aún, qué sería del soñador? Durante una entrevista con That Drummer Guy, agregó: "el protagonista de la historia... sus sueños se transmiten por todo el mundo como una forma de entretenimiento y por eso se está aprovechando de una compañía llamada ´Voice Of Trespass´. Sigue uno de sus sueños en el que está buscando una familia que perdió, [...] todos esos aspectos diferentes de la historia y trata mucho sobre su bienestar personal, corrupción, depresión, la perspectiva del público en general, [...] muestra su vida de una manera y las cosas con las que lidia".


Formación:

Dan Briggs - bajo
Blake Richardson - batería
Tommy Giles Rogers Jr. - voz, teclados
Paul Waggoner - guitarras
Dustie Waring - guitarras




Origen: Raleigh, North Carolina, EE.UU.
Género: Progressive Metal
Fecha de lanzamiento: 09/03/18
Formato: MP3
Tamaño: 85.7 MB
Calidad: 320 KBps (CD RIP)
Tracklist:

01. Condemned To The Gallows (06:35)
02. House Organ (03:41)
03. Yellow Eyes (08:45)
04. Millions (04:43)
05. Gold Distance (instrumental) (01:02)
06. Blot (10:27)

Duración: 35min 13seg


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miércoles, 11 de abril de 2018

Sons Of Apollo - Groove (martes 10 de abril de 2018)




Lo que parecía una obviedad, finalmente sucedió: los Sons Of Apollo visitaron Argentina por primera vez en su más que joven trayectoria. Por qué una obviedad? Porque al menos cuatro de los cinco músicos que componen el supergrupo, es decir Mike Portnoy (ex-Dream Theater y un sinfín de etcéteras), Derek Sherinian (ídem anterior), Billy Sheehan (Mr. Big, The Winery Dogs... ), Ron "Bumblefoot" Thal (ex-Guns n´ Roses, Art Of Anarchy... ) y Jeff Scott Soto (Yngwie Malmsteen's Rising Force, Talisman, Axel Rudi Pell y otro sinfín de etcéteras) han visitado el país en algún que otro momento y se han ido más que conformes, especialmente Mike Portnoy, que ha pasado por nuestro país en innumerables ocasiones, presentando prácticamente todos sus proyectos a excepción de Flying Colors. También resultó ser una obviedad dado que la banda bajó a Sudamérica con el objeto de presentar su disco debut, "Psychotic Symphony". Raro hubiese sido que no pasen por Argentina.

Quienes entretuvieron a los presentes previo al plato fuerte de la noche fueron los locales Presto Vivace, quienes dieron comienzo a su set a las 19:30. La banda nos tiene acostumbrados a las citas en donde el rock y/o el metal progresivo dan el presente. Ya los vimos junto a Opeth y a The Winery Dogs (uno de los tantos proyectos de Mike Portnoy, también con Billy Sheehan como co-equiper) y estuvimos a un paso de verlos junto a Steven Wilson, si el manager del británico no hubiese dado la orden de cancelar las presentaciones de bandas soportes el mismo día del show. El tema es que Presto Vivace nunca defrauda. Su propuesta puede resultar aburrida para aquellos no familiarizados con la veta más progresiva del metal. Pero para quienes estamos en el palo, resulta un manjar tanto a la vista como al oído verlos en vivo. Si bien toda la banda sobresale en lo suyo (son algo así como los Dream Theater argentinos), la labor y performance del ex-veterano de Malvinas Marcelo Perez Schneider se lleva todas las miradas. El músico no solo toca como los dioses sino que además de sobresalir, hace sobresalir a sus compañeros, mediante fraseos e incluso miradas cómplices. Por otro lado, siempre está con una sonrisa en el rostro, demostrándole a la audiencia que disfruta y en demasía lo que hace.

A las 20:45, comenzó a sonar "Intruder" de Van Halen en un volumen un tanto más alto que los temas que le antecedieron, momento en que las luces se apagaron completamente, dando pie a los protagonistas de la noche a aparecer en escena. Con un sonido realmente arrollador, la banda dio inicio al show de la mano de "God Of The Sun", tema que abre el disco debut de la banda. Le sucedieron "Signs Of The Time", "Figaro's Whore" y "Divine Addiction", todos pertenecientes al único opus de la banda. Acto seguido, para sorpresa de varios menos para quienes seguimos la gira de la banda por Chile y México, la banda se despachó con una excelente y fidedigna versión de "Just Let Me Breathe" de Dream Theater, la ex-banda de dos actuales Sons Of Apollo e incluso productores del supergrupo. Si me preguntan, los SOA no tienen absolutamente nada que envidiarle a los de Petrucci y compañía. Incluso verlos ejecutar esta versión da a entender que a los de Petrucci les falta corazón, aunque no es tan difícil darse cuenta, para ser honesto. La banda siguió repasando temas de su único disco, hasta que llegó la hora de lucirse cada uno en lo suyo. Primero fue el turno de Billy Sheehan y su bajo Yamaha Attitude Double Neck, utilizado por primera vez en la gira modelo 2001 de Steve Vai. Para los entendidos en la materia, el bajo superior está afinado B E A D, mientras que el bajo inferior cuenta con afinación standard (E A D G). Lo que Sheehan hace con su bajo es cuasi-mágico, prácticamente imposible de reproducir. Salvo por él, claro. Luego de "Lost In Oblivion", le tocó el turno al boricua Jeff Scott Soto, quien deslumbró a los presentes con un impromptu pero con horas de ensayo, donde Soto hizo uso de su pedalera vocal para autoarmonizarse. Nos recordó que una de sus principales influencias es el gran Freddie Mercury, por lo que hizo partícipe al público tal como lo hizo Freddie en todos sus shows. Acto seguido, y a modo de homenaje, Soto cantó "Save Me" de Queen, con la ayuda del guitarrista Ron Thal y del público, precisamente en el estribillo. Quien también tuvo su momento para demostrar sus dotes fue el tecladista Derek Sherinian, quien luego de un sentido solo (que incluso hizo retumbar el pecho de los presentes al tocar las notas más graves) comenzó a ejecutar la intro de "Lines In The Sand" de Dream Theater, tema que le siguió a continuación. Al igual que en el cover anterior, nada que envidiarle a los gigantes progresivos. Sorprendió gratamente la performance de Ron Thal en voces, no solo en coros sino además como protagonista en el micrófono durante casi una estrofa entera del tema. Antes de "Lines In The Sand", los Sons Of Apollo se despacharon con una excelente versión del theme de La Pantera Rosa, que explotó donde debía explotar y se calmó donde debía calmarse. Superlativo. Para los bises, Jeff Scott Soto sorprendió al público bajando del escenario sin alarde alguno y se dirigió a una de las barras del recinto para pedir una cerveza, previo al arranque del último cover de la noche, "And The Cradle Will Rock... " de Van Halen. Soto cantó desde el público prácticamente todo el tema, mientras sus compañeros lo miraban sonrientes e incluso envidiosos desde arriba. Con este gesto, Jeff Scott Soto no solo se puso al público argentino en el bolsillo, sino que además demostró ser un frontman de esos que no abundan. El cierre del set, de dos horas de duración, llegó de la mano de "Coming Home", primer corte difusión de "Psychotic Symphony" y uno de los temas que más gustan del disco (sin desmerecer al resto, aclaro).

De esta manera, este nuevo supergrupo se despidió de Argentina hasta nuevo aviso. En redes sociales, inmediatamente después del show prometieron volver. Se los notó muy pero muy a gusto. Aca los esperamos. Honestamente, no pensaba asistir. Como dije por ahí, menos mal que fui.


Setlist:

01. God Of The Sun
02. Signs Of The Time
03. Figaro's Whore
04. Divine Addiction
05. Just Let Me Breathe (cover de Dream Theater)
06. Labyrinth
07. Lost In Oblivion
08. The Prophet's Song / Save Me (cover de Queen)
09. Alive
10. The Pink Panther Theme (cover de Henry Mancini)
11. Opus Maximus
12. Lines in the Sand (cover de Dream Theater)
13. And The Cradle Will Rock... (cover de Van Halen)
14. Coming Home